Vuelos “baratos” o guía de cómo ahorrar en espacio interior, empleados y aparatos inútiles.

Ya no sólo se ahorra en el espacio de la cabina, sino también en limpieza, comodidad, empleados y cualquier aparato que se salga del presupuesto. Tampoco hay comida ni bebida (sino a costo extra) y dentro de poco te harán pagar por el salvavidas o el uso del retrete
Volví recientemente de un viaje por tierra irlandesa. Fuimos a visitar a la familia y escogimos un vuelo “barato” que saliera de Santiago o Coruña. Así que terminamos por ir con Ryanair. La diferencia con Iberia era de unos 200 euros y salir desde Santiago. Pero ahora me diréis si valió la pena.
El día del vuelo fue dos días después de la gran redada de terroristas en Londres, y nosotros teníamos que parar forzosamente allí. Pero aunque pueda parecer increíble eso no fue lo peor. Esperábamos retrasos, colas, pérdidas de equipaje pero nada de eso se produjo. Ahora sí, el ahorro de 200 euros hizo que tuviéramos que caminar el aeropuerto de un extremo a otro.
Primero aterrizas en el lugar más apartado, y caminas durante más de media hora (menos mal que al ser un aeropuerto de segunda no es tan grande como Heathrow) para retirar tus maletas. Después tienes que caminar otra media hora para facturar tu equipaje nuevamente con la misma compañía porque para ahorrar dinero no lo hacen por ti. Una vez que ya tienes la tarjeta de embarque en la mano te vas otra media hora para llegar hasta la puerta 50. Nuevamente para ahorrar dinero tienes que caminar por la pista hasta el avión, lo cual en un día radiante no molesta mucho pero ¡amigo! cuando llueve y no puedes llevar contigo más que una bolsa con el pasaporte…
A la vuelta todo fue un poco de lo mismo pero la puerta 50 se transformó en la 52 que queda en un extremo maloliente que te recuerda que como te costó 200 euros menos eres un pasajero de segunda. Tras pasar por la pista mojándote llegas a bordo de un avión en dónde las azafatas te indican las medidas de seguridad en inglés si bien después hay una grabación que te repite las instrucciones en español pero sin ejemplificar porque los empleados no saben idiomas. Y por primera vez, después de muchos, muchos años de vuelo he visto hormigas y hasta una mosca en la cabina ¡? por no hablar del mal olor. Pero eso sí nos costó unos 200 euros menos…
De todas formas nuestro caso fue afortunado si lo comparamos con algunas personas (más de 1500 según dijo el aeromozo de Ryanair) a los que les anularon el vuelo… Ryanair lo único que les daba era una fotocopia en dónde aparecían la página web y/o un teléfono al que podían llamar para cambiar su ticket pero la compañía no se hacía cargo si era al final de sus vacaciones o si perdía otra conexión … ahora sí, si no le gustaba el método podía reclamar la devolución de su dinero, que seguro era menor que el que pagaría en otra compañía… ¿estamos seguros de esto???